Hoy queremos traeros una dulce experiencia hasta el Blog. En la familia hay mucho adicto al dulce y hemos querido sorprenderles haciéndoles GOMINOLAS CASERAS. Es una forma natural y "sana" de disfrutar de unos pecados dulces sin que la conciencia les remuerda demasiado.
Nos pusimos manos a la obra para elaborar las mejores gominolas caseras del mundo, dicho y hecho, las hicimos.
Como no podía ser de otra forma queremos compartir con tod@s vosotr@s la receta que utilizamos y el paso a paso de la elaboración. Además, en las variaciones de la receta podréis ver que cambiando ciertos ingredientes podemos hacer nuestras gominolas aptas para Diabéticos o Lights.
Es un proceso muy sencillo en el que los más peques de casa os podrán echar una mano. Disfrutarán un montón haciendo sus propias gominolas. Tomar lápiz y papel y manos a la obra... no os llevará mucho tiempo y os sorprenderá el resultado.
LOS INGREDIENTES
1 sobre de gelatina neutra en láminas o 2 sobres si es en polvo.
1 sobre de gelatina de sabor.
200 grs. de agua.
300 grs. de azúcar.
Azúcar para rebozar las gominolas.
Aceite o mantequilla.
Moldes de silicona.
VARIACIONES DE LA RECETA
-- Podéis sustituir el azúcar por sacarina o edulcorante. 100 grs. de azúcar equivalen a 10 grs. de edulcorante. Así que para nuestra receta necesitaríamos 30grs. de sacarina. Si queréis que vuestras gominolas sean aptas para Diabéticos, solo tenéis que cambiar el azúcar por Tagatosa. En este caso, la proporción es 50%, es decir, 100 grs. de azúcar equivalen a 50 grs. de Tagatosa. Por lo tanto en nuestra receta utilizaríamos 150 grs. de este edulcorante natural.
-- En vez de agua, podemos utilizar zumo o leche. En el caso de que utilicéis gelatina sabor limón, echar al agua un chorrito de zumo de limón si queréis darle acidez.
Lo primero que haremos, antes de nada, será pintar los moldes o el recipiente con aceite o mantequilla para que podamos desmoldar las gominolas fácilmente. Aquí podéis utilizar dos opciones, aceite o mantequilla. Nosotras hemos probado ambas para saber el resultado y la verdad es que no hay diferencia, ambas son perfectamente válidas. Algunos recomiendan utilizar aceite de Girasol y no de Oliva, ya que por lo que parece con el de Girasol las gominolas no cogen sabor. Nosotras lo hicimos con aceite de oliva y no hemos notado que cogieran sabor. Os lo contamos para que conozcáis todas las opciones y podáis elegir.
Para empezar la receta, pondremos a fuego lento en un cazo el agua y la gelatina neutra (que previamente hemos hidratado en agua, mirar las indicaciones de la vuestra) hasta que esta última se diluya. Importante no dejar hervir. Removeremos suavemente para ayudar a su disolución. Nosotras optamos por gelatina SIN GLUTEN, no cuesta nada y así si hay algún Celíaco podrá disfrutar de las gominolas caseras tranquilamente.
Una vez que la gelatina neutra esté bien disuelta añadiremos la de sabor, en nuestro caso de Frambuesa.
Sin dejar que hierva, iremos removiendo la mezcla hasta que el azúcar esté totalmente disuelto. Si se os crea una espumita en la superficie de la mezcla ir retirándola para que no influya en el resultado. Lllegados a este punto ya tendremos preparada la base de nuestras gominolas. Sin dejar que se enfríe, verteremos la mezcla en los moldes que previamente hemos preparado.
Tras rellenar los moldes, los dejaremos enfriar a temperatura ambiente al menos durante 12 horas. También podéis verter la mezcla en una fuente y luego darles forma con cortadores de reposteros de vuestro gusto. Antes de desmoldarlas comprobar que están tersas y que tienen la suficiente consistencia.
Cuando ha pasado el tiempo necesario, solo nos queda rebozarlas en azúcar aunque también podemos dejarlas sin él, esto ya para gustos.
Nosotras para sorprender un poquito más lo que hemos hecho ha sido preparar una pequeña presentación, en la que hemos introducido las gominolas en unas bolsitas y les hemos puestos unos pequeños detalles en forma de lazo, etiqueta y un osito de madera.
Como habéis podido ver, la receta y la forma de hacer gominolas es muy sencilla. Hay cosas que parece que tienen que ser complicadas de hacer, y resulta que indagando un poco son lo más simple del mundo. Desde aquí os animamos a que os remanguéis en casa y saquéis un ratito para realizar estas gominolas caseras. Además puede ser una buena idea y solución económica para cumpleaños y fiestas. Sorprenderéis a todos, peques y mayores.
La verdad es que parece más complicado...pero será cuestión de probar. Seguro que aquí en casa triunfo con las gominolas!! Gracias!!!
ResponderEliminarQue va no son nada complicadas de hacer. Lo que pasa que en el post teníamos que explicar muchas cosillas pero ya verás como a la hora de hacerlas alucinas con la sencillez.Un beso guapa
EliminarQué buena pinta!! Una pena que estoy a dieta después de los excesos de verano sino las haría fijo :)
ResponderEliminarEstán muy ricas...no te castigues...siempre te queda la opción edulcorante para darte una pequeña alegría en forma de gominola. Gracias por el comentario un besazo
EliminarYo las he hecho y me han salido muy buenas, pero el azucar que las recubre, al cabo de pocos minutos se humedece y se cae, sabéis si hay otro tipo de azucar para que quede más parecido a las que venden en tiendas? pues estéticamente quedan mucho mejor
ResponderEliminarGracias
Holaaaa!Nos alegramos un montón de que te hayas decidido a hacer las gominolas.En cuanto al azúcar es cierto que hay que tener cuidado ya que se humedece y no queda tan estético. Una de las soluciones es desmoldar las gominolas y dejarlas un par de horas a temperatura ambiente antes de echarles el azúcar para que pierdan cierta humedad.Otra sería echar el azúcar cuando se van a presentar,lo único que esto sólo valdría en caso de no tener que embolsarlas.También se podría machacar parte del azúcar (o usar azúcar glas) para darles un primer baño con este y posteriormente con azúcar normal.
EliminarEsperamos que estas ideas puedan resultarte útiles...Sí descubrieras algún otro truco cuéntanoslo te lo agradeceríamos un montón.
Muchísimas gracias por tu comentario.Un abrazo